jueves, 28 de mayo de 2009

Las redes sociales del odio


'No soy extrovertido. Prefiero criticar en un rincón. Burlarse une'

MARÍA OVELAR EP3 EL PAÍS 22/05/2009

Las redes antisociales nacieron para paro-diar Facebook o MySpace y su manera de coleccionar amistades a miles. Ahora reivindican su carácter ¿contracultural?.

El último eslabón de las comunidades virtuales son las redes antisociales, plataformas que parodian el buen rollo que impera en Facebook o MySpace y lo sustituyen por odio e insultos. Con nombres tan explícitos como Enemybook o I fucking hate you, estos portales nacieron de la necesidad de mofarse de la taberna global en la que se ha convertido la Red. Uno de ellos, Myfrienemies, incluso permite insultar desde el anonimato, una práctica muy perseguida en los últimos tiempos.

No soy extrovertido. Soy de los que prefieren quedarse en un rincón criticando con un par de personas a los asistentes de una fiesta. Por cualquier motivo: que nos parezcan estúpidos, hablen raro o tengan pinta de tontos. Burlarse une. Owen Knapp fundó en 2004 I fucking hate you (IFHY), una plataforma feroz que cuenta con cerca de 7.000 perfiles. A diferencia de Facebook, aquí es complicado coleccionar amistades. IFHY sólo permite que seas amigo de alguien si compartes un mínimo de personas odiadas. Pero no se puede tildar de antisocial, aquí los usuarios también comparten algo: el odio.

En medio de la explosión de las redes, nos preguntábamos por qué aparecían. A mí me parecían estúpidas. ¿De qué servía aceptar amigos sin ton ni son, explica Bryant Choung por teléfono desde Washington. A este estudiante de MIT se le ocurrió fundar su particular red, Snubster, después de una cena con unos colegas en 2006. Me presentaron a una chica. Cuando llegué a casa me esperaba una petición de amistad en Friendster [una de las redes sociales más antiguas]. Aquello me sacó de quicio. Me sentí obligado a aceptar aunque sabía que no volvería a hablar con ella. El objetivo de su página web no es otro que el de ser borde. Imagina que alguien te ha ofendido. Lo incluyes en el apartado On Notice [avisados]. Y si lo odias, lo pones en Dead to me [muerto para mí], explica.

A este estadounidense de origen coreano le sorprende el triunfo de las plataformas tradicionales. Antes de que Occidente enloqueciera con ellas, en Corea y Japón ya existían. Pensé que no funcionarían en EE UU por lo cauta que es la gente con su vida privada. Se equivocó. Y el ciberespacio se inundó de ?contenedores de relaciones, el concepto con el que Gaby Castellanos describe Tuenti o Facebook.

Castellanos preside la agencia de publicidad SrBurns y la asociación de especialistas en redes sociales Social Media Club. Son un reflejo de la vida. Hasta generan celos. Hay quien rompe si se entera de que su pareja no ha publicado en Facebook que están saliendo o si la ve ligar. ¿Quién no recuerda que Lindsay Lohan cortó con su novia en Twitter?. A raíz del boom de las redes, su agencia ideó una herramienta para hacer la prueba del algodón definitiva: Facebrity, una aplicación que mide el índice de popularidad de un usuario en Facebook y que ya cuenta con más de 5.000 fans. No compensa coleccionar 32.000 amigos si no te relacionas con ellos, argumenta; ?Facebrity mide la reacción de la comunidad a tus comentarios y diferencia a los internautas entre tímidos y abiertos.

Para Sean Bonner, director de Bode Media y editor de blogs de 34 años, el problema es el término: Etiquetamos como amigos a contactos digitales, pero al principio sólo son meros conocidos. Bonner fundó Isolatr, una red social para llamar la atención sobre esta situación. En ella, si alguien quería abrir un perfil, no podía: la página web era falsa. Era una forma de decir basta, ¡no tengo por qué abrirme un perfil en todas las redes que aparecen!.

¿Existe un elemento contracultural en todo este fenómeno? Son las redes anti- sociales el nuevo punk Roberto Balaguer, psicólogo y experto en nuevas tecnologías, cree que sí: Relacionarse a través de la agresión es algo pobre, pero para muchos es la única manera. Enemybook, por ejemplo, funciona como la red social de los aislados o incomprendidos. Toma aspectos underground como el odio a las normas. Por ejemplo, la supuesta obligación de tener que ser simpático en la Red?.

En Enemybook, red con más de 16.000 seguidores, no se añaden amigos, se añaden enemigos. Los más odiados: George Bush (casi 4.000 enemigos), el propio Enemybook (180) y el nuevo diseño de Facebook (40). Matulef, su creador, explica desde Boston la génesis del portal. No me fiaba de lo virtual, prefería el cara a cara. Enemybook nació como sátira..., ¡pero se volvió en mi contra! Me hizo popular y tengo más contactos de los que conozco?, revela.

Profesores de la UdL advierten del peligro del "uso lúdico" de Internet

EFE - Barcelona - 25/05/2009

Los alumnos de secundaria hacen un uso demasiado "lúdico" de Internet y tienen escasa capacidad para encontrar, entender y priorizar los contenidos de la Red, según un estudio sobre el uso docente de la red realizado por los profesores de la Universidad de Lleida (UdL) Manoli Pifarré, Jaume Sanuy, Conxita Vendrell y Susanna Gòdia.

Son los autores del libro Internet en la Educación Secundaria: pensar, buscar y construir, en el que, tras un trabajo de seis años y la participación de 20 profesores y 400 alumnos de ESO, propone herramientas para gestionar el uso de Internet en los institutos, infundiendo una visión crítica de la Red.

Pifarré explica que los adolescentes ven el ordenador como "una máquina de jugar" en la que interactúan con amigos, con los que intercambian material audiovisual y que "les permite mantener una conversación con un cierto anonimato". Los adolescentes "pasan horas y horas" viendo vídeos o descargando música y tienen tan interiorizadas las redes sociales que "aquel que no está, queda marginado en el instituto", con lo que los actos de la vida virtual tienen consecuencias en la vida real. Pifarré añade que los jóvenes "saben hacer funcionar un ordenador, pero no saben utilizarlo. Se limitan a dar un paseo superficial sin profundizar".

Hipersexualización, pornografía y viejos clichés.


Gemma Lienas

En: http://www.elpais.com/articulo/cataluna/Madres/pesar/elpepiespcat/20090525elpcat_5/Tes/

Vivimos en una sociedad hipersexualizada en la que las mujeres de los anuncios tiran el tanga por la ventanilla del automóvil, en la que el sexo de las películas es explícito y, además, poco real (sólo hace falta observar, por ejemplo, los barrocos e incómodos modelos de lencería que lucen ellas), en la que cualquier niño de primero de primaria que sepa juntar letras y mover un ratón puede escribir "tías buenas" en Google y aprender a los seis años qué es una felación... Y en cualquiera de esas situaciones de ficción nadie usa preservativo y todo se desarrolla según viejos clichés de dominación masculina y sumisión femenina.

Así, en nuestras aulas si una chica lleva un condón en el bolsillo es tachada de "puta" y si exige el uso del preservativo a su compañero sexual tiene que lidiar con sus lamentos: "me corta el rollo" o "me aprieta" -será en el ego, digo yo- o "siento menos placer". O los tres juntos. Así que por muchas campañas institucionales que se hagan, el "confía en mí; yo controlo" del chico vence más a menudo de lo imaginable las resistencias de ella.

Obviamente, inmersión sexual no es equivalente a educación sexual.

martes, 26 de mayo de 2009

DISNEY Y LOS NUEVOS ICONOS ADOLESCENTES DE LA GENERACIÓN TWEEN. un set completo con ropa, música, cine, discos e.... ideología

ICONOS DE LA ADOLESCENCIA

Hannah Montana en 'El Hormiguero'

VIDEO - ELPAÍS.com - 23-05-2009





¿Adónde fue Bambi?

JUAN DIEGO QUESADA EL PAÍS 23/05/2009
Hannah Montana, Jonas Brothers, High School... La factoría Disney ha creado un nuevo universo que arrasa en el mundo infantil y adolescente del siglo XXI. Éste es su secreto
En la habitación de un hotel de cinco estrellas del centro de Madrid, un rato antes de que entre Miley Cyrus, la actriz de 16 años que interpreta a Hannah Montana, aparece su padre, el conocido cantante de country Billy Ray Cyrus. Maquillado y sonriente, lo primero que hace es aclarar que el líquido rojizo que se tambalea en el interior del vaso que lleva en la mano es zumo. Está aquí para presentar la película que protagoniza junto a Miley. Habla de la fe, de superar los obstáculos que te pone la vida y un par de cosas más. Antes de salir, cuando tiene un pie en la puerta, le interrumpen:
-¿Cuál es el secreto de vuestro éxito mundial, Billy Ray?
-Sé tu mismo y haz las cosas de corazón, con pureza.
Quienes le escuchan se quedan en silencio. O no han entendido nada o creen que Billy Ray se ha ido con el secreto en el bolsillo.
Ni Bambi ni el ratón Mickey Mouse, símbolo de la factoría durante décadas, pisan ya la alfombra roja. La generación tween, chicos de entre 2 y 17 años, ha encumbrado a una hornada de artistas adolescentes (de carne y hueso) que hacen de todo. Cantan, bailan y ponen su cara a tazas y tubos de pasta de dientes. No usan piercings ni tienen tatuajes. Al contrario: leen la Biblia, cobran una paga mensual y alardean de mantener aún la virginidad. Hablamos de The Jonas Brothers, una banda de pop formada por tres hermanos quinceañeros de Nueva Jersey; de la propia Miley Cyrus, y de Zac Efron y Vanessa Hudgens, los protagonistas de High School Musical (HSM). Mueven entre todos 2.900 millones de dólares al año. El mundo se ha rendido a estos jóvenes con acné y pinta de haberse quitado hace poco el corrector de dientes, que serían sin duda los amigos favoritos de los padres de muchos adolescentes.
Hace 58 años, Bob Iger nació en una familia de clase media en Long Island (Nueva York). El padre, trompetista de jazz, trabajaba como publicista. Iger recuerda haber visto, de pequeño, los dibujos animados de Mickey, sentado ante un viejo televisor en el salón de casa. Hace poco confesó a la revista Fortune que se había bajado la sintonía de aquella serie a su Ipod. Es la nostalgia, quizá porque no le queda otro remedio. Iger, estudiante ejemplar y empleado metódico, presidente de Disney desde 2005, dirige una mastodóntica compañía que ha vivido momentos difíciles. Con Mickey y Minnie lejos de los focos, los adolescentes son ahora la imagen y el sello de Disney. El secreto de Iger, según los analistas, consiste en sacar el máximo rendimiento a todas las divisiones de la compañía: la versatilidad de los artistas, que cantan, bailan y actúan, da para hacer películas, series, conciertos, musicales, giras promocionales... Todos recuerdan a Iger, en medio de una tormenta bursátil, anunciado que la tercera parte de HSM estaba a punto de estrenarse. Era un aval.
A Billy Ray le señalan como el hombre que se esconde tras la chica que convierte en oro todo lo que toca. No le preocupa en exceso, ni siquiera cuando le dicen en Madrid que ese mundo color de rosa que pregona no existe. "No somos perfectos", replica, "pero la religión y los valores son muy importantes para nosotros". El filme que promociona fue el más taquillero durante su primer fin de semana (2,7 millones de euros de recaudación) y la banda sonora ocupa el número uno de ventas.
Billy Ray, compositor casi anónimo de una canción pegadiza que llegó a España con el título No rompas más mi pobre corazón, recuerda una tarde de hace cuatro años, cuando se presentó con una guitarra y Miley ante los ejecutivos de Disney. Ellos planeaban lanzar en el canal de cable una serie sobre la vida de una cantante adolescente de éxito (Hannah) que, por el día y con otra identidad, intenta llevar una vida corriente. Los eligieron, la serie arrasó; la historia ha dado el salto al cine en 2009 y los discos que han grabado son éxitos en todos los países. Miley, a la que la revista Forbes sitúa ahora entre las veinte estrellas más poderosas por debajo de los 25 años, acumula una fortuna personal cercana a los 1.000 millones de euros.
En la propia Disney cogió por sorpresa tanta gloria, la de Hannah y la de los demás artistas adolescentes. Abrumados, los ejecutivos de la factoría casi no tenían palabras para explicar el fenómeno. Pero no perdieron ni un minuto y pusieron en marcha la maquinaria. Además de discos y películas, tu vida podría girar en torno a Hannah, HSM o The Jonas Brothers: pijamas, peines, maletas, MP3 y un largo etcétera. Baila como ellos, vístete como ellos y cuando lleguen a tu ciudad ve corriendo a comprar las entradas para el concierto.
José Vila es el vicepresidente y director general de Disney Channel para España y Portugal y a él también le parece espectacular cómo la compañía está explotando estas franquicias para adolescentes. "En esta nueva época ofrecemos algo más actual, que combina música y baile con historias próximas a los niños. Son historias universales", dice. Y señala que la fuerza de Disney radica en su flexibilidad, en que un producto hecho para televisión se puede trasladar al negocio musical, a los DVD o a los productos de consumo.
Al igual que millones de padres, Antonio Del Valle, comercial de 36 años, se pregunta: "¿Qué demonios puedo hacer?". Irene, su hija de 11 años, devora mientras tanto el menú infantil de una hamburguesería. "En Navidad le compré ropa de Hannah Montana y las joyas. Para el cumpleaños, el videojuego y el disco. Hasta nos pasamos a la televisión de pago", relata Antonio. Irene ríe como un ratoncillo y cuenta que también sus amigas son fanáticas. "Hannah tiene las mismos problemas con los chicos que nosotras", añade. Los padres, ahora más que nunca, consultan a los hijos qué comprar y los publicistas consideran que con la generación tween se abre un mercado apetecible, muy inflado por padres generosos y abuelos cargados de regalos. Susan Linn, profesora de la Universidad de Harvard, considera que los padres se ven obligados a creer que sus hijos "tienen que tener experiencias adultas pronto", como acudir a un concierto de masas. La autora de un libro titulado Niños Consumidores explica que los padres tienen un miedo excesivo a decepcionarles y no cumplir con sus expectativas.
Los jóvenes de Disney llevan tres años copando portadas de revistas. Una de ellas es Bravo, una publicación juvenil de gran éxito. A su directora, Katrin Senne, nada de esto le ha pillado por sorpresa. "¿Estrellas adolescentes que triunfan? Nada nuevo. Lo novedoso es que ahora nos implican a los mayores, que los acompañamos al cine o al concierto. Y al día siguiente lo comentamos en el trabajo". José María Castillejo, uno de los fundadores de Pocoyo, una serie española para pequeños de calidad, le da la razón y apunta que a ellos, que en muchos casos toman como referencia a Disney, les obsesiona gustar a los padres. "Tiene que ser algo entretenido, para toda la familia", añade. El éxito de estos teens, para el experto en psicología Ramón Soler, se remonta a que antes los adolescentes, en las sociedades tradicionales, tenían que superar una serie de pruebas para convertirse en adultos. Los ritos "hoy han desaparecido y los chicos suplen la pérdida proyectándose en sus ídolos", dice Soler. Hay otros que son muy críticos, como José Manuel Errasti, profesor de psicología de la Universidad de Oviedo, quien destaca que estos personajes son cantantes, no trabajadores de la metalurgia ni parados. "Disney crea una vida ficticia en la que los jóvenes se sienten seguros, pero es irreal", comenta. Errasti cree que la factoría vende un set completo con ropa, música, cine, discos e.... ideología. "Es la ideología conservadora americana, la que obliga a dejar las cosas como están. Se vive en un universo donde lo importante es ver qué chico te gusta y cómo te peinas".
En eBay se ha llegado a pagar cerca de 1.500 euros por un concierto de estos chicos, cuando la media de grupos como U2 o Sprigsteen ronda los 250. Kevin, Joe y Nick son tres hermanos que forman la banda Los Jonas Brothers y que se enrolaron con Disney para grabar la película Camp Rock, en la que hacían de grupo invitado a un campamento para aspirantes a cantantes. El padre de los chicos es músico y pastor, y la madre, cantante y actriz. Es el producto perfecto para la factoría. Educados y caballerosos, los tres sacan brillo a su castidad. "Ellos son personas", les ha defendido el progenitor en varias ocasiones, "no se fabricaron en un laboratorio de productos de Disney".
Los críticos de música han llegado a comparar el furor que desatan los jóvenes de Disney con aquel que produjeron en los setenta cuatro chicos que se hacían llamar The Beatles. ¿Quiénes son estos adolescentes, cómo se atreven?, se preguntan muchos. En apariencia no son nada arrogantes y huyen de ese aura de jóvenes, ricos y malditos. Britney Spears, otra chica de la factoría que se desvió del buen camino, es todo lo que ellos no quieren ser. Hace un par de días, Miley Cyrus escribió en su Twitter que la gente no pierda el tiempo llamándole gorda, después de que ella misma bromeara con sus muslos. "Leed la Biblia", aconsejó a sus detractores. -
'¿Adónde fue Bambi?' es un reportaje del suplemento 'Domingo' del 24 de mayo de 2009

jueves, 7 de mayo de 2009

Crisis con piernas.


Robert Mur
| 05/05/2009 - 23:23 horas

A pocos pasos del palacio de la Moneda, un puñado de pequeños locales con vidrios opacos ayudan a sobrellevar la crisis a los oficinistas y funcionarios santiaguinos. Son los populares cafés con piernas. En la Galería Alessandri se amontonan el Blumenau, el Paraíso, el Coffee Break, dos Alibaba y un Ikabarú. Elijo el Paraíso.

En apenas cuarenta metros cuadrados tres chicas casi desnudas, cubiertas sólo por ropa interior de fantasía de colores chillones, sirven cafés dentro y fuera de la barra. Evelyn, morenaza, se mueve por todo el local, alternando. Indudablemente la estrella es Giordana, rubia platino de pechos descomunalmente siliconados que no para de contornearse ante su afortunado cliente de turno, consciente de que atrae las miradas de todos. No sé por qué a mí me toca Ámbar, otra morena que me recibe con un beso en la mejilla que intencionalmente roza la comisura de mis labios.

Los cafés con piernas no son prostíbulos, ni barras americanas. Surgieron al acabar la dictadura. No sirven alcohol, abren de día y los clientes son mayoritariamente empleados del centro de Santiago que acuden después de comer o visitan a las chicas antes de regresar a sus casas. No hay contacto físico entre unos y otras, más allá de los "cándidos" besos de bienvenida y despedida, aunque hay camareras que aprovechan para hacer horas "extras" con clientes habituales cuando cierra el café. La mayoría son bailarinas o modelos de poca fortuna, estudiantes que se pagan las clases con las suculentas propinas -más que con el sueldo-, o jóvenes madres que quieren dar un futuro a sus hijos.

Mientras me pone un cortado, Ámbar insiste en que su nombre es auténtico. Tiene 24 años y empezó en esto a los 18. Dice que la crisis se nota, que quienes antes tomaban varios cafés, ahora toman uno. Que hay menos propinas. Y que muchos "vienen a despedirse" porque han quedado en el paro. Es el caso de Óscar Z., capataz de obra, desempleado desde hace unos meses. "Ahora casi no puedo venir", cuenta este cafetero, que antes frecuentaba casi cada día estos locales.

A metros del Paraíso, en una librería, encuentro a su dueño, que también es propietario del Blumenau y de otros cinco locales de la galería. Alfredo Figueroa, no obstante, niega la crisis y dice que no ha notado menos recaudación. "Hay otras cosas en las que se puede ahorrar más que con un café que cuesta 900 pesos (1,2 €)", dice Figueroa.

En Santiago hay un centenar de cafés con piernas, algunos en versión recatada, como el Haití o el Caribe, en el concurrido paseo Ahumada. De hecho estos bares fueron los precursores, a finales de los sesenta, de los cafés más canallas. Sus vidrios son transparentes, su interior es luminoso y sus puertas están abiertas. Es normal ver a mujeres tomando café. Y las camareras son esculturales, pero llevan tapados y ceñidos vestidos, aunque sus minifaldas permiten contemplar sus largas piernas. El cajero del Caribe no quiere dar su nombre, pero reconoce el impacto de la crisis. "¿A qué no afecta la crisis?", se pregunta, antes de reiterar que su local no es un café con piernas. "Es café servido por mujeres", matiza.

martes, 5 de mayo de 2009

Documental: Hablando de sexo con adolescentes (RTVE)

Fuente: Heterodoxia 5 Mayo 2009

Imagen Documentos TV RTVEExtraído de RTVE: La educación sexual de los niños y adolescentes se ha dejado, prácticamente, en manos de los medios de comunicación y el resultado de ello es que están desbordados por mensajes relativos al sexo, pero muy mal informados. Una prueba de ese desconocimiento es que el número de abortos entre chicas de 15 a 19 años se ha duplicado en los últimos diez años.

En ‘Hablando de sexo con adolescentes’ se recogen los testimonios de más de un centenar de adolescentes, entre 14 y 17 años, que han hablado con libertad sobre cómo viven y sienten ellos el sexo, sobre sus fantasías, sus carencias en materia de educación sexual y sus miedos

  • “HABLANDO DE SEXO CON ADOLESCENTES” se emite en DOCUMENTOS TV el martes 5 de mayo de 2009 a las 23:05 en La 2 de TVE.

Producción: NAIS PRODUCCIONES (España), Duración: 55’, Dirigido por Manuel Sánchez Pereira

En el documental se comprueba que los chicos y chicas son consumidores, casi diarios, de pornografía, que ven en la televisión o en internet. Esta circunstancia hace que el prototipo de hombre y mujer que los adolescentes buscan tenga muy poco que ver con la realidad. De hecho, cada año unos cuarenta mil menores solicitan una intervención de cirugía estética. Los expertos también señalan que conceptos como la sensualidad, el erotismo o el compromiso, han sido desechados. El sexo es penetración.

Además, se ha convertido en una oferta de ocio más. Por eso, muchos chicos no tienen ningún pudor, ni problema moral, en reconocer que si una noche no ligan, van a lo seguro: pagan y punto. Acuden en grupo a un prostíbulo, como demuestra el aumento masivo del uso de la prostitución en menores de treinta años.

Mientras tanto, los padres se sienten incómodos hablando de este tema con sus hijos y confían en que ya reciben suficiente información por otras vías.


"Perdidos en la tribu" y los estereotipos de género

Me ha sorprendido el planteamiento de Perdidos en la tribu, la nueva apuesta de Cuatro para los domingos por la noche. Posiblemente, abordar la diversidad cultural a través de un reality no constituya la forma más rigurosa de iniciar su estudio y quizás hacerle el juego a este producto sea un bajar un escalón más en la banalización de todo cuanto nos rodea, pero a pesar de mis recelos, confieso que el programa me seduce y se me antoja cargado de posibilidades pedagógicas, porque invita a hacerse preguntas. Sería una pena que sólo se quedara en un fast food exoticista para mero divertimento de la audiencia, y aún más que se deslizara hacia los abismos degradantes de Gran Hermano. Veremos. Hoy por hoy, creo que los víeos del programa ofrecen una material interesantísmo para que cualquier docente inicie a su alumnado en las cuestiones de género. La pena, en este sentido que es que no se hayan escogido roles de género menos reiterativos.

E. Jimeno

Enlaces:

http://www.cuatro.com/perdidos-en-la-tribu/videos/consejo-mentawai/20090503ctoultpro_21/

y

http://blog.cuatro.com/perdidos-en-la-tribu/